El día amaneció frío pero despejado en Madrid. Después de recoger en el aeropuerto a Alfred y Dorothy, dos clientes suizos que me han contratado de forma privada, nos dirigimos hacia los llanos de Calera y Chozas. Allí no tardamos en ver las primeras avutardas, dos machos preciosos en cortejo frente a frente, también un grupo de varias hembras, menos llamativas. Un alcaraván levanta el vuelo junto al coche para posarse no lejos de donde se contraban las avutardas. El día ha sido también prolífico en rapaces aquí, los tres aguiluchos, cenizo, pálido y lagunero, buitres negro y leonado, los dos cernícalos y un águila culebrera. La verdad es que cambió bastante el día y a mediodía el calor era considerable. Así que decidimos trasladarnos para ver las orquídeas de Almaraz, y que aún aguantan estoicamente las altas temperaturas de estos días. Hoy hemos registrado ocho especies... la verdad es que este lugar es un auténtico paraíso para los amantes de las orquídeas. Los clientes han disfrutado como enanos, Alfred me ha llegado a decir que había conocido muchos lugares increíbles para ver flores, pero que como éste ninguno. El día lo hemos completado con la tradicional visita al lugar de los buhos reales, de nuevo mami con un pollo muy crecido, además de roquero solitario, golondrina dáurica, curruca cabecinegra y más buitres negros y leonados. A las 19;00 ya estábamos en El Tenado para un pequeño descanso antes de cenar. Mañana nos vamos a Monfragüe.
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